900 gramos menos, 7,1 kg menos en total, no dejo de sorprenderme, hay semanas que creo que no hago el mérito suficiente como para perder tanto, pero bueno, es lo que hay y salvo que la báscula esté más desequilibrada que mi cabeza, pues estoy contento.
Ya no escribo tanto como antes, hay días que no tengo tiempo, otros no estoy inspirado, no quiero escribir por obligación, quiero hacerlo porque me apetece, porque esto es una terapia en realidad, el escribir, y solo funcionará si lo hago con ganas.
Lo he comentado con mi mujer varias veces, no estoy preparado para ser padre ( de BEBÉS ), me supera, si no fuera por ella...muchas veces me fijo en como interactuan mis hijos con mi mujer, como se miran, que cosas se dicen y la verdad es que es increible!!. Ella me dice muchas veces "madre no hay más que una, y a tí te encontré en la calle", hecho que yo me negaba a admitir, yo defendia que el padre puede tener la misma conexión y ser tan importante para los hijos como la madre: ERROR! La capacidad de sacrificio que tiene mi mujer, no la tengo yo ni de lejos, y aunque yo moriría por mis hijos, ella sería capaz de morir, resucitar y volver a morir. Ver como los cuida, los achucha, los besa y como ellos le corresponden y se deshacen en sus brazos es emocionante, me hace sentir muy orgulloso de ella.
Yo me he dado cuenta que prefiero los niños del año de edad para adelante, antes se me hacen insufribles, ya me pasó con el grande y me está pasando ahora con el pequeño, no soporto ver como lloran y no saber el motivo, y no poder hacer nada para consolarlo, y seguir llorando, no lo soporto hasta el punto de crearme una ansiedad que me bloquea totalmente, si, son mis hijos lo sé, y los quiero con locura, pero no estoy preparado para esta presión. Por eso quiero hacer un homenaje a mi mujer, por ser mujer y por ser la mejor madre del mundo. TE QUIERO MAMÁ.
