A punto de cumplirse una semana desde que inicié este reto personal, y las sensaciones son bastante buenas, no he pasado hambre excepto en algún momento puntual, pero si he tenido que renunciar a algunas tentaciones suculentas, me he dado cuenta que tan importante es lo que comemos, como lo que dejamos de comer. Tras el fiasco del kebap, he controlado un poco más las calorías que lleva cada alimento, así si un alimento me parecía muy calórico, lo reemplazaba por otro menos calórico, intentando así no llevarme sorpresas desagradables. Eso sí me he prohibido totalmente las patatas fritas tanto en bolsa como fuera de ella, los refrecos que no sean light, los quesos que no sean frescos, los postres tipo tocino de cielo, copa de chocolate, flan de dulce de leche..(ummm que bueno este último) y he de decir que se nota la diferencia a la hora de hacer las digestiones, mucho más ligeras.
La prueba de fuego es mañana, la báscula juzgará si lo que hecho ha servido de algo. Yo creo que sí, si antes comía todas esas cosas prohibidas y ahora no las como, unido a mis 2 litros de agua diario y a que he levantado el culo del asiento y he andado unos cuantos kilómetros, los cálculos no pueden fallar, lo que no sé es cuanto habré perdido, 100,200,300 gramos?.....40 kilos quizás?? woow esto molaría, mi reto se hubiese acabado ya, y eso que me he dado 5 años de plazo.
Intento llevar un calculo de no sobrepasar las 2.000 kcal diarias y lo he cumplido todos los días, unos días más holgado, otros más justitos, pero todos! me he portado bien.
Esta próxima semana igual introduzo algún pequeño cambio más en mis habitos de vida, pero aún no está decidido, dependerá del resultado de mañana, no hay que correr y asimilar bien las cosas para no agobiarse y fracasar prematuramente.
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